top of page

Estamos Preparados?

  • Foto del escritor: Gabriel STV
    Gabriel STV
  • 17 dic 2019
  • 3 Min. de lectura

Seguramente los que estamos en el mundo de la supervivencia estamos más o menos preparados en cuanto a conocimientos y artículos que ayuden a sobrevivir en caso de catástrofes, cuando alguien nos pregunta si estamos preparados, seguramente lo primero que viene a nuestra mente es un reconto de los alimentos almacenados, mochilas de supervivencia, planes, artículos, etc. Pero realmente somos conscientes de lo que tendríamos que enfrentar ante una catástrofe a gran escala?

Hoy en día vivimos una vida bastante cómoda en comparación a lo que se viva 100 años atrás, por supuesto que dependiendo el país donde se vive las cosan varían, pero en general el ser humano se acostumbró a la modernidad, la alimentación ya no se trata de salir de caza o cosechar y luchar contra las inclemencias del tiempo y las plagas, es simplemente ir al supermercado y tomar lo necesario. Somos conscientes que en caso de catástrofe las cosas no son románticas como en las películas y la vida será dura? Imaginemos un día normal donde lo único importante será conseguir alimentos, ya sea buscándolo por donde sea, cazando o dedicando un considerable tiempo en cosechar nuestro propio sustento (descontando que tengamos las herramientas y los conocimientos necesarios), otro tema es si contamos con la suficiente fuerza física, y no me refiero solamente a fuera muscular, para llevar una vida de ese tipo, hoy en día la mayoría de los trabajos son sumamente sedentarios, horas sentados detrás de una computadora, y aunque nuestro trabajo fuera más físico, tampoco se compararía al esfuerzo necesario para los trabajos que nos esperan. No es lo mismo estar en forma que estar fuerte para los trabajos duros que nos esperarían, personalmente lo sufrí, en un tiempo estaba en una excelente condición física, competía a nivel mundial en karate, y hacia boxeo como Hobby, lo que significaba estar en un buen estado físico, pero cuando comencé la construcción de mi casa decidí ayudar al albañil, si bien gracias al excelente estado físico que tenía lo hice, mi agotamiento físico era mucho mayor que el del albañil acostumbrado a un tipo de esfuerzo distinto, y estamos hablando de condiciones normales, y bien alimentados.

La realidad es que las obligaciones que tenemos actualmente nos impiden dedicarnos 100% al preparacionismo, y tampoco nadie lo hace aunque tendría todo el tiempo disponible, hay que vivir también, pero se pueden hacer pequeños cambios que ayuden a mejorar el aspecto antes mencionado, si bien hay que ser realista en que nada nos asegurara estar preparados totalmente, si hay cosas que podemos hacer, por ejemplo, hacer algún tipo de deporte siempre contribuirá positivamente, si tenemos que ir de un lugar a otro y el trayecto es corto hacerlo a pie y no en auto o transporte siempre es una opción, subir escaleras en lugar de ascensor, etc. Todas estas cosas aunque no nos dejara como un Rambo, sí que nos ayudaran en salir del sedentarismo.

Hacer trabajos físicos también nos ayudara a comprender y fortalecer nuestras limitaciones, hacer un pozo al sol durante dos o tres horas, o transportar varias bolsas de cemento nos mostrara lo difícil que sería hacer estas cosas en tiempos de supervivencia, no digo que salgamos corriendo a hacer estas cosas, sería perjudicial y además lo que sirve es la continuidad, pero si es muy bueno, siempre que podamos, hacer trabajos físicos, no hace falta que sean extremos, cortar el pasto, mantener el jardín, algún trabajo de plomería, etc., la diversidad de movimientos, fuerzas, etc., hace que nos mantengamos en movimiento, y de paso ahorramos algún dinero.

En este artículo no tocamos el tema emocional al enfrentar una catástrofe, solamente hablamos de la parte física, pero es importante saber que ambas van de la mano y son muy importantes.


 
 
 

Comments


Publicar: Blog2_Post
  • Facebook
  • Twitter
  • LinkedIn

©2019 por El Tiempo del Lobo. Creada con Wix.com

bottom of page